Kylian Mbappé sigue sin moverse «ni un milímetro» de su hoja de ruta. Enrocado en su idea de cumplir contrato y cobrar los casi 150 millones que debe pagarle esta temporada el PSG entre salario y primas, el delantero ha tranquilizado al Real Madrid ante las sucesivas filtraciones del club parisino de ofertas multimillonarias para ficharle.
«No habrá ninguna subasta», han asegurado desde el entorno de Mbappé a su interlocutor de confianza en la cúpula de la casa blanca. El jugador ha querido tranquilizar al Real Madrid porque sabe que su futuro, este verano o el que viene, pasa por jugar en el Bernabéu y no está dispuesto a volver a perder el tren de su vida.
Mientras tanto, el PSG se afana en intentar desatascar una situación imposible. Los dueños qataríes del club han dado la orden de traspalarle al mejor postor, pero sus enviados en París tratan de explicarles que, con la legislación de la Unión Europea, eso es imposible. Si Mbappé se niega a ser traspasado, no hay nada que pueda hacer el PSG más allá de rescindir su contrato previo pago de los importes pactados.
La presión del PSG no cesa
La opción de dejarle una temporada entera en la grada es la amenaza firme que sale desde Qatar, aunque podría encontrarse con el escollo legal de que Mbappé, que ha sido titular en todas sus temporadas en el PSG y es el jugador mejor pagado de la plantilla, denunciara al club parisino por “acoso laboral” en una situación en la que el PSG debería justificar que sus ausencias son por motivos deportivos, algo difícilmente justificable en el mejor jugador del mundo.
En el Real Madrid, mientras tanto, siguen contemplando todo el lío desde la distancia. En la cúpula del club blanco dan por seguro que no habrá opción alguna de fichar a Mbappé este verano y que el PSG «ni nos ha llamado ni nos va a llamar para negociar». Saben que el jugador tiene la sartén por el mango y que, con su idea de cobrar el contrato que tanto le costó negociar, lo normal es que se salga con la suya… aunque todavía queda mucho verano por delante.
